El pasado 30 de septiembre, alrededor de las 11 de la mañana, una intensa movilización policial se desplegó en el Centro de Maternidad ubicado en la colonia Joaquín Colombres, luego de que una mujer reportara la desaparición de su bebé recién nacido. La madre, quien había sido dada de alta tras dar a luz, denunció que su hijo había sido presuntamente sustraído del hospital. Según su relato, personas desconocidas la habrían engañado para firmar un documento relacionado con los gastos del parto, lo que desencadenó la confusión y el reporte de la desaparición.

A la 1 de la tarde del mismo día, una célula de Búsqueda de Personas de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) de Puebla llegó al hospital para investigar el supuesto robo del menor. Las autoridades se entrevistaron con la madre y representantes de la clínica para esclarecer los hechos. La situación generó una gran expectativa en la zona, y se activó una Alerta Amber para localizar al bebé.

El 1 de octubre, entre la 1 y 2 de la tarde, las autoridades desactivaron la Alerta Amber tras confirmar que el bebé había sido localizado. Sin embargo, el caso dio un giro inesperado cuando se reveló que no hubo sustracción del menor. Isaías Santiago de la Rosa, Director del Centro de Maternidad, aclaró que “no hubo robo de menor” en el hospital y que la situación había sido producto de un malentendido.

La madre, quien inicialmente reportó la desaparición, fue detenida y actualmente se encuentra en un proceso legal. Las autoridades continúan con la investigación para esclarecer completamente los hechos y determinar si hubo algún delito. El hospital ha cooperado con las autoridades, quienes ya descartaron la posibilidad de un robo.