El yogurt es uno de los alimentos lácteos más consumidos en nuestro país, al igual que la leche y los quesos, son de origen animal. Es considerado un alimento rico en proteínas, calcio y algunos microorganismos benéficos para el cuerpo.
Sin embargo, no todas las marcas de yogurt que se venden en el mercado nacional son saludables y cumplen con las normas de calidad para asegurar un producto seguro para los consumidores.
Ante este problema, la Procuraduría Federal del consumidor (PROFECO), realizó una serie de pruebas a varias marcas que son vendidas en las tiendas de consumo.
En el análisis realizado en el Laboratorio Nacional del Consumidor, la PROFECO evaluó 52 productos que usan la denominación de yogurt, 25 sólidos y/o batidos, 18 para beber y nueve de los llamados estilo griego. Las muestras se adquirieron en diversos puntos de venta, previa verificación de que estuvieran en refrigeración, dentro de la fecha de caducidad y en empaques cerrados sin deterioro. Los parámetros evaluados fueron: bacterias benéficas vivas, nutrientes, contenido de almidón, información declarada, contenido neto, azúcares, contenido de calcio.
Las marcas de yogurt que no son recomendadas y las razones
Marcas de yogurt con más contenido azúcar
Chilchota, yogurt de fresa de 1kg
Chilchota, yogurt natural cremoso de 1kg
Yoplait disfruta (cremoso yogurt con trozos de fruta) de 145 gramos
Marcas de yogurt que además de la grasa de la leche adicionan grasas vegetales (exceso de lípidos):
Palmalac yogurt natural de 4 kg
Palmalac yogurt de fresa de 4kg
Danonne danup de fresa bebible de 240g
Marcas que mienten a los consumidores
Estas marcas tienen publicidad engañosa, pues aseguran ser naturales, pero adicionan azúcar a sus productos:
Yoplait (yogurt natural sin grasa de 125g)
Chilchota (yogurt natural cremoso de 1kg)
Chilchota (yogurt natural acidificado de 1kg)
Palmalac yogurt natural de 4 kg
Yoplait (yogurt natural para beber de 242 gramos)
Chilchota (yogurt natural para beber cremoso de 236 gramos)
Yoplait (yogurt para beber light natural sin grasa y adiconado con vitamina E, de 242 gramos)
Ten en cuenta que existen evidencias de que los beneficios que ofrecen estos productos se deben en parte a la presencia de bacterias benéficas vivas, el consumo de probióticos debe ser regular y sostenido, para que tenga el efecto deseado en las personas, ya que éste desaparece una vez que se suspende su ingesta.
Antes de adquirir un yogurt verifica que el empaque esté bien cerrado y se encuentre dentro de la fecha de caducidad. Observa que estén refrigerados y consérvalos así hasta consumirlos, ya que cuando el producto no se refrigera adecuadamente las bacterias benéficas mueren.
Lee la etiqueta e identifica el producto que prefieres; recuerda que los hay con diversos contenidos de grasa, proteína y azúcar. Algunos yogures tipo light contienen edulcorantes sintéticos como el aspartame y acelsulfame k.