“¡Que Dios ilumine los corazones, para que nunca más se repitan gestos similares y para que las atormentadas regiones del Noroeste y Suroeste de Camerún puedan finalmente encontrar la paz!”, es el apremiante llamamiento del Papa Francisco durante la Audiencia General de este miércoles, 28 de octubre, en el cual pidió por los estudiantes de la Academia Internacional Madre Francisca, asesinados este fin de semana en Kumba, Camerún.
Un acto cruel y sin sentido
En su llamamiento, el Santo Padre se unió al dolor de las familias de los jóvenes estudiantes brutalmente asesinados el sábado pasado en Kumba, Camerún. “Siento un gran desconcierto – afirmó el Pontífice – por un acto tan cruel y sin sentido, que ha arrebatado la vida de los pequeños inocentes mientras estaban en clases en la escuela”. Asimismo, el Papa deseó que, “las armas se callen y que se pueda garantizar la seguridad de todos y el derecho de cada joven a la educación y al futuro”. Antes de concluir su llamamiento, el Obispo de Roma expresó a las familias, a la ciudad de Kumba y a todo el Camerún su afecto e invocó el consuelo que sólo Dios puede dar.