En la filosofía jesuita, el cuidado de la casa común es un pilar fundamental para el proceder diario. Las obras encomendadas a la Compañía de Jesús tienen como una de sus tareas principales implementar acciones que abonen a esta misión y que vean hacia un horizonte de protección del medioambiente, tal como se demuestra en el libro Iniciativas para la sustentabilidad y el cuidado de la casa común en la IBERO Puebla.


A través de 11 escritos, diversos actores de la Casa de Estudios brindan un testimonio de acción, esperanza y comunidad, que “nos da perspectiva de horizonte” y “va acorde a nuestra convicción como Universidad”; así lo expresó el Mtro. Mario Patrón Sánchez, titular de la Rectoría.


“Nuestra pauta de interpretación institucional de la realidad nos impone el imperativo de generar mecanismos de congruencia interna para salir a lo externo con procesos de incidencia, y, sobre todo, de exigibilidad”: Mtro. Mario Patrón


Ese sentido educativo que se preocupa por cada ámbito de la vida fue reafirmado por la directora general Académica, la Dra. Lilia Vélez Iglesias, para quien esta obra “visibiliza el esfuerzo que estamos haciendo institucionalmente en la Universidad para, por un lado, ser una universidad sustentable, y por otro, formar y generar conocimiento útil”.


Cinco autores compartieron testimonios de cómo se incidió positivamente en los entornos con los que se colaboró. Un ejemplo fue el proyecto Juntos 19S, una iniciativa interinstitucional e interdisciplinar para ayudar a las comunidades damnificadas por el terremoto ocurrido en México el 19 de septiembre de 2017.


La Mtra. Mercedes Núñez Cuétara, coordinadora del Área de Servicio Social de la IBERO Puebla, habló de los retos que tuvieron que enfrentar al ingresar a las comunidades para comenzar los procesos de reconstrucción o implementación de nueva vivienda. Se rehabilitaron 40 viviendas y 4 casas se construyeron desde cero, lo que implicó un proceso de inserción diferente en el cual los mayores retos fueron la idea de progreso, los tiempos disonantes y la individualización.


La Dra. Nadia Castillo Romero, directora del Departamento de Ciencias Sociales, compartió cómo las convicciones por formar otras formas de aprendizaje e incidencia desde la academia permearon en los planes de estudio de la IBERO Puebla; específicamente, en la Licenciatura de Ciencias Ambientales y Sustentabilidad, que tiene antecedentes desde 2005 y que hoy se ve reflejado incluso en la Maestría de Gestión de Empresas de Economía Social.


Los derechos humanos son un pilar de estos proyectos, y como una muestra clara de ello está un informe elaborado por el Instituto de Derechos Humanos Ignacio Ellacuría, SJ (IDHIE), en el que se exponen 11 casos de dinámicas que afectan al agua y al territorio en comunidad poblanas. Esto “da cuenta de un modelo económico de un sistema capitalista, que se basa en la extracción y acumulación de capital”, detalló el Lic. Roberto Rosete Guzmán, responsable de Orientación Jurídica y Psicosocial del Instituto.


Gracias al modelo académico de la IBERO Puebla y sus Preparatorias, las y los estudiantes también tuvieron un papel fundamental en este escrito. El Mtro. Héctor Morales Rodríguez, coordinador Académico de la Preparatoria IBERO Tlaxcala, documentó los procesos pedagógicos de la asignatura de experiencia rural, en la que el alumnado se inserta en diferentes experiencias comunitarias, rurales o incluso laborales para “dimensionar el impacto que tiene el desarrollo del país y como se va visualizando en elementos muy concretos en la sociedad”.


Finalmente, el Dr. Gregorio Romero de la Vega, académico del Instituto de Diseño e Innovación Tecnológica (IDIT), habló de los caminos de consciencia ambiental que incentivan al estudiantado de la Universidad Jesuita a desarrollar proyectos que aporten a la sustentabilidad. “El conocimiento también es un derecho al que deberían tener acceso a las comunidades, y creo que desde la IBERO Puebla se está haciendo un esfuerzo para que […] se puedan lograr ese tipo de actividades”.

Por Veral