El gobernador de Puebla Miguel Barbosa Huerta, aseguró que la nueva Ley del Notariado que envió al Congreso y fue aprobada, va a mejorar las condiciones del ejercicio profesional del notariado, además rechazó las versiones sobre reducir el requisito de población para considerar la entrega de una patente.
“La Ley va a mejorar las condiciones del ejercicio profesional del notariado, para beneficio de la gente que requiere este servicio, para muchos fines de seguridad jurídica, amplios fines y desde luego para que los propios profesionales del notariado, los notarios públicos, ejerzan su función de manera más clara más, más apegada a las normas legales, es el propósito, debo decir que las cosas no están bien en el sistema notarial poblano y esto tiene que ver con la permisibilidad que las autoridades en materia notarial han tenido con un ejercicio del notariado que, para muchos casos se ha desviado”, sentenció.
El mandatario afirmó que nunca más habrá notarios por una concesión del gobernador en turno: “lo sé porque hasta hoy, con mucho respeto se lo digo a los señores notarios, todos cumplieron con los requisitos de ley sin duda que sí, todos, pero desde el decano que sea hasta el más novel del ejercicio, todos fueron notarios porque el gobernador en turno quiso que fuera notarios, hoy habrá concurso de oposición con absoluta rigidez y excelencia del conocimiento”, refirió.
Miguel Barbosa Huerta, explicó que la reforma regulará las prácticas notariales y todos los requisitos para poder acceder a una patente y todos los asuntos que estén bajo su encargo.
Dijo que esta función pública dejará de ser una empresa en donde el dueño ya ni firmaba, porque lo hace un auxiliar de notario, además dijo que la ley termina con el privilegio de heredar las notarías y en automático quienes sean auxiliares de notarios se conviertan en los titulares, ahora quien aspire a tener una patente, tendrá que hacer su examen correspondiente.
En la conferencia de prensa desde Casa Aguayo, recordó que 24 notarías fueron revocadas, de las 29 que se otorgaron con criterios políticos en el gobierno de Rafael Moreno Valle. “No estamos afectando la autonomía del notariado… más bien vamos a acabar con los varones del dinero y de la opulencia”.