«Estoy horrorizado por el número de víctimas civiles de los enfrentamientos», ha declarado Abdou Dieng. «Al menos 331 personas han muerto en todo el país, entre ellas cinco cooperantes, y casi 3200 han resultado heridas».

Los enfrentamientos entre tropas del ejército nacional y una poderosa milicia rival conocida como Fuerzas de Apoyo Rápido (RSF) estallaron hace seis días, y han tenido un impacto devastador en la vida civil y en la importante operación de ayuda humanitaria en curso en todo el país.

Crisis de alimentos, agua y atención sanitaria

El coordinador aseguró que incluso breves pausas acordadas entre las facciones rivales, que hasta ahora han ignorado todos los llamamientos a un alto el fuego, permitirían a los civiles acceder a alimentos y agua esenciales.

En los hospitales hay una grave escasez de personal médico especializado, suministros de oxígeno y bolsas de sangre, según la Organización Mundial de la Salud, mientras que la falta de electricidad y los apagones ponen en alto riesgo a los pacientes hospitalizados.

«También están aumentando rápidamente las necesidades de salud mental y apoyo psicosocial, especialmente entre los niños, a medida que continúa el conflicto», señaló la Oficina de Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios.

Asesinado un empleado de la agencia de migración de la ONU

El director general de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) ha declarado: «confirmo con gran pesar la muerte de un miembro del personal en Sudán esta mañana, después de que el vehículo en el que viajaba con su familia al sur de El Obeid se viera envuelto en un fuego cruzado entre dos partes enfrentadas».

António Vitorino explicó que el trabajador deja mujer e hijo recién nacido, «y a nuestro equipo en Sudán de luto». 

«La seguridad de todo el personal de la OIM es mi prioridad número uno. Seguimos trabajando con nuestros socios para actualizar nuestra respuesta en esta materia», declaró.

Este último brote de violencia ha obligado a la agencia a suspender sus operaciones humanitarias en Sudán. “La OIM lleva operando en Sudán desde el año 2000, respondiendo a las complejas necesidades humanitarias del país, donde se calcula que hay 3,7 millones de desplazados internos», prosiguió el director.

Solidaridad con Sudán: ONU Mujeres

La directora de ONU Mujeres también emitió una declaración en la que expresaba su grave preocupación por el efecto de los incesantes combates en las mujeres y niñas sudanesas.

«Como en todas las crisis, ésta tendrá sin duda repercusiones nefastas y desproporcionadas en la vida de las mujeres y niñas sudanesas. Nos solidarizamos con el pueblo sudanés y mantenemos nuestro compromiso de apoyarlo”, dijo Sima Bahous.

«Debemos prestar atención a sus llamamientos en favor del alto el fuego y la paz y comprometernos a apoyarlas en todo lo que hagan», añadió.

Sima Bahous señaló, además, que ya están saliendo a la luz informes de violencia sexual y de género, y teme que «serán cada vez más frecuentes» e hizo un llamamiento a las tropas gubernamentales y a las milicias para que «garanticen que ninguna mujer o niña se vea afectada por estos crímenes».

La directora insistió en que «todos los casos» de violencia sexual y de género deben ser investigados y perseguidos sin excepción.