Debido a la contingencia que vivimos en estos momentos con la alerta mundial del coronavirus, la Secretaría de Salud de México nos da algunas recomendaciones para prevenir la exposición y transmisión del virus:

  • Lavarnos las manos frecuentemente con agua y jabón o utilizar soluciones a base de alcohol al 70%
  • Cubrir nuestros estornudos y tos con el ángulo interno del brazo
  • Evitar escupir en espacios públicos, de ser necesario emplear un pañuelo
  • Evitar tocarte nariz, boca y ojos con las manos sucias
  • Limpiar y desinfectar superficies
  • Reposo en caso de enfermedades respiratorias
  • Evitar contacto con personas con enfermedades respiratorias

Si bien, estas medidas deben aplicarse para evitar que esta enfermedad se convierta en una epidemia en el país; la limpieza y desinfección constantes, podrían provocar el desarrollo de otros padecimientos, por ejemplo, resequedad, irritación y sensibilidad de nuestra piel.

Todos los jabones poseen sosa caustica que es altamente corrosiva: una limpieza constante ocasiona la pérdida de nuestros aceites naturales y la aparición de irritación. Un caso similar es el del uso el alcohol que puede provocar comezón, resequedad y en los casos más severos, hinchazón.

Por ese motivo, además de alinearnos a las recomendaciones de nuestro sector salud, es indispensable que durante esta situación mantengamos hidratada y humectada nuestra piel.

Hidratarnos es una acción para nuestra dermis que implica el consumo de una dieta equilibrada y tomar mínimo dos litros de agua diarios. Mientras que, humectarnos dependerá de los productos especializados para nuestra epidermis.

En México, existen diversos productos para humectarnos, sin embargo, es indispensable elegir aquellos con ingredientes naturales que respeten el pH natural de nuestra piel y de preferencia, libre de isotiazolinonas, formaldehído y parabenos. Una gran opción, es Sopharma pH5, la primera línea dermacosmética formulada para pieles sensibles.

Cuidemos nuestra salud ante estos momentos de contingencia, manteniendo atención y responsabilidad con nuestra piel, recordemos que es nuestra primera capa protectora hacia el exterior: mantenerla equilibrada, evitará que agentes externos entren a nuestro organismo.

Por Veral