Las consecuencias de la crisis social y económica del coronavirus empujarán a la pobreza a unos 115 millones de personas, y aquellas que ya vivían con menos de dos dólares al día, más de 700 millones, serán afectados aún más profundamente.
“Para las personas más pobres del mundo, la pandemia de COVID-19 representa una doble crisis”, advirtió este sábado el Secretario General en su mensaje oficial para el Día Internacional para la Erradicación de la Pobreza.
António Guterres explicó que las personas más pobres son las que corren mayor riesgo de contagiarse del virus y las que tienen menos acceso a una atención de salud de calidad.
Además, las últimas estimaciones indican que este año la pandemia podría sumir en la pobreza a 115 millones de personas, lo que supondría el primer aumento en décadas. Las mujeres corren más riesgo porque tienen más probabilidades de perder el trabajo y menos probabilidades de gozar de protección social.
“Vivimos tiempos extraordinarios que requieren esfuerzos extraordinarios para luchar contra la pobreza. La pandemia exige medidas colectivas enérgicas. Los gobiernos deben acelerar la transformación económica invirtiendo en una recuperación ecológica y sostenible”, expresó Guterres.
El titular de la ONU dijo que es necesaria una nueva generación de programas de protección social que cubran también a las personas que trabajan en la economía informal.
“Solo lograremos superar esta pandemia si hacemos causa común. En el Día Internacional para la Erradicación de la Pobreza, solidaricémonos con las personas que viven en la pobreza, durante toda la pandemia de COVID-19, pero también después de ella”, concluyó.