Carlos III fue proclamado oficialmente rey en la capital escocesa de Edimburgo, donde se espera que la tarde de este domingo llegue el féretro de su madre, Isabel II, procedente del castillo real de Balmoral.
Ese primer texto leído en el territorio de Inglaterra, donde se constata la muerte de Isabel II y su sucesión por su primogénito, es el mismo que se ha leído este domingo en las ceremonias públicas en las otras tres naciones de Reino Unido, que han estado igualmente acompañadas de desfiles militares y salvas de cañón.
Edimburgo espera la llegada del cortejo fúnebre de la difunta soberana, que acaba de pasar por la ciudad de Aberdeen para atravesar después Dundee hasta llegar a la capital escocesa sobre las 16:00 h local.
El lunes, Carlos III encabezará una procesión desde la residencia real edimburguesa de Holyroodhouse hasta la cercana catedral de St Giles, donde se celebrará un servicio religioso y se instalará una capilla ardiente.
Antes de que el féretro regrese el martes a Londres, el rey y la reina consorte Camila, acompañados de la primera ministra británica, Liz Truss, viajarán a Belfast y más adelante a Gales, previo al funeral de Isabel II en Londres el 19 de septiembre.