En el CBTIS 128 de Ciudad Juárez, Chihuahua, dónde el miércoles sicarios asesinaron a un estudiante e hirieron a otra, al escuchar los disparos, los docentes creyeron que se trataba de un simulacro como el que realizaron el año pasado, pero la realidad nuevamente superó la ficción.
En noviembre del año pasado, los alumnos y maestros participaron en un simulacro de balacera, siguiendo los protocolos para estos casos señalados por Protección Civil, ya que en Ciudad Juárez, Chihuahua, se han hecho más comunes y continuas las balaceras en la calle, manera en que los delincuentes ajustan sus cuentas por deudas o rivalidades derivados del control de la plaza por la venta de drogas al menudeo.
Con este ataque, parece que los sicarios han optado por disparar contra civiles inocentes, en este caso estudiantes, en un intento de mostrar su superioridad frente a la policía local, o provocar el miedo entre la población.
El director del plantel, José González Cereceres, explicó que en el plan de estudios se realizan simulacros para diversos escenarios, uno de ellos para casos de balacera.
Por eso, el martes, al escuchar al menos 7 disparos de arma de fuego, muchos pensaron que se trataba de otro simulacro sin aviso previo. Pero la realidad fue otra, ya que dos pistoleros abrieron fuego contra todos los estudiantes que salían de clases, matando a uno de ellos e hiriendo a una adolescente, la cual fue declarada fuera de peligro.
En el simulacro de balacera, alumnos y docentes deben tirarse al suelo, al suponer que el enfrentamiento a tiros o ejecución se está dando fuera del plantel.
Ahora tendrán que hacer ajustes, para simulacros donde tiradores disparan a los alumnos al salir del plantel educativo.