En un tranquilo barrio residencial, donde aparentemente se vendían golosinas y frituras, se descubrió un oscuro secreto. Las autoridades llevaron a cabo un mega operativo en un inmueble ubicado en la zona de Morillotla, en el municipio de San Andrés Cholula. Lo que parecía ser una dulcería común y corriente resultó ser un narcolaboratorio de proporciones alarmantes.

La Mezcla Macabra

En este lugar, los delincuentes mezclaban drogas sintéticas con productos que todos conocemos: Pelón Pelo Rico, Skittles, Gomitas, Nutella, Doritos y totopos. Estos dulces y frituras eran impregnados con sustancias ilícitas para ser vendidos a estudiantes de secundaria, preparatoria y universidad en la zona metropolitana de Puebla. La creatividad retorcida de los criminales no tenía límites: incluso la crema de avellana y los vapeadores se utilizaban como vehículos para distribuir drogas.

El Líder de la Célula

Entre los detenidos se encuentra Sergio Omar Manzola Mendoza, alias “El Burro”, líder de esta peligrosa célula delictiva. Las autoridades encontraron en su poder 450 kilogramos de marihuana, 500 gramos de cristal y precursores químicos para fabricar drogas sintéticas. Además, se decomisaron armas largas, vehículos y una orden de aprehensión pendiente.

Destinos Turísticos y Más Allá

Las investigaciones revelaron que las cervezas también formaban parte del macabro negocio. Estas bebidas eran enviadas a destinos turísticos en el sureste de México, así como a ciudades de los Estados Unidos. Los vapeadores, por su parte, tenían un mercado en los estados donde el uso de cannabis es legal.

Este desmantelamiento es un recordatorio escalofriante de cómo los criminales pueden infiltrarse en lo cotidiano, utilizando productos aparentemente inofensivos para sus oscuros fines. Las autoridades continúan investigando y desarticulando estas redes, pero la vigilancia y la conciencia ciudadana son cruciales para mantenernos a salvo de estas amenazas invisibles.

Por Veral