El dirigente estatal del Partido Revolucionario Institucional (PRI) en Puebla, Néstor Camarillo Medina, aseguró que no hubo exclusión de alcaldes que renunciaron al partido y desmintió cualquier negación de candidaturas para las elecciones venideras.
Explicó que, a pesar de las renuncias públicas, se iniciará el proceso de expulsión para evitar que regresen a las filas del PRI después de ser utilizados por el partido Morena.
En entrevista, Camarillo Medina lamentó la salida de cinco presidentes municipales que decidieron abandonar el PRI justo antes de la designación de candidaturas para el próximo proceso electoral. Negó categóricamente cualquier acusación de exclusión y afirmó que todos los alcaldes tenían asegurada una candidatura, ya sea para competir por una diputación local o para su reelección en la presidencia municipal.
“Todos tuvieron candidaturas, a nadie se le negó nada. Lupita Vargas tenía la diputación local en Xicotepec ya en coalición, Pepe Márquez tenía su reelección también por la coalición y Manuel Orato dijo que ya no iba a buscar nada”, explicó Camarillo Medina.
El líder del PRI en Puebla señaló que las renuncias de los alcaldes fueron tomadas por convicción propia y derivadas de acciones tomadas por las dirigencias estatal y nacional del partido. Afirmó que el proceso de expulsión se llevará a cabo para evitar que regresen después del proceso electoral.
Cabe recordar que los alcaldes que anunciaron su baja son Aurelio Flores Solano de Guadalupe Victoria, José Luis Márquez Martínez de Zacatlán, Guadalupe Vargas Vargas de Xicotepec, Manuel Orato Vélez de San Salvador El Seco y Emiliano Vázquez Bonilla de Zapotitlán de Méndez.
