Al resaltar la coordinación entre los tres órdenes de gobierno para actuar con prontitud ante la explosión de una toma clandestina en la junta auxiliar de San Pablo Xochimehuacan, lo que evitó una tragedia mayor, el gobernador Miguel Barbosa Huerta dejó en claro que este hecho no quedará impune, pues la ley será aplicada en contra de quien resulte responsable.

En conferencia de prensa en la que estuvieron presentes el presidente municipal de Puebla, Eduardo Rivera Pérez; el director de PEMEX Logística, Javier González del Villar; el comandante de la VI Región Militar, José Alfredo González Rodríguez, Ernesto García, comandante de la Guardia Nacional, así como autoridades municipales, estatales y federales, el titular del Ejecutivo anunció que el Gobierno del Estado indemnizará a la familia de la persona fallecida, pagará los gastos de las y los poblanos hospitalizados y reparará las viviendas dañadas. 

Asimismo, y tras expresar su solidaridad con la población afectada, puntualizó que el Sistema Estatal DIF apoya con alimentos e insumos de primera necesidad a quienes están en los albergues y lo mismo se hará con las familias que perdieron sus viviendas y que se encuentran evacuadas.

Comentó que para evitar saqueos y que el patrimonio de las y los poblanos que fueron evacuados resulte afectado, las policías Estatal y municipal patrullan la zona. Además, indicó que ningún dato sobre lo que acontezca sobre este hecho será omitido.

El titular del Ejecutivo informó que instruyó la integración de un grupo interinstitucional para atender este hecho, mismo que estará conformado por autoridades de los tres órdenes de gobierno.

Por Veral