La escasez de agua en la ciudad de Oaxaca representa un duro golpe a la economía familiar, debido a que conlleva un gasto de entre 500 a mil 300 pesos por la compra de pipas de 3 mil 500 litros a los 12 mil litros, aunque el costo es variable porque depende por la demanda.
El desabasto en el suministro de agua es una constante en esta capital, la falta del servicio es una queja a lo largo del año, pero se multiplica de marzo a junio, de tal manera que las familias se ven obligadas a pagar a concesionarios privados.
El Sistema Operador de los Servicios de Agua Potable y Alcantarillado (Soapa), empresa paraestatal del gobierno estatal, advirtió que los pozos que abastecen a la capital de estado, tiene un 60 por ciento y, va a la baja, por lo que habrá de espaciar (aún más) la entrega conforme avance el estiaje.
La cobertura que se requiere para dotar a la población de la capital del estado es de 100 litros por segundo, sin embargo, los pozos únicamente entregan 35 litros por segundo.
A la falta de un sistema moderno de abastecimiento, la constante escasez del líquido y una demanda creciente de agua, se agrega el conflicto permanente entre los municipios de Oaxaca de Juárez y San Agustín Etla.
San Agustín Etla, propietario comunal de los manantiales que abastecen a la capital, presiona constantemente al gobierno estatal, con el cierre de válvulas, a cambio de recursos financieros, lo que afecta directamente a los usuarios.
