El Instituto Nacional de Migración (INM) y la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS) realizaron la mesa “Diálogo social para la implementación de políticas de derechos laborales de mujeres migrantes en el trabajo del hogar remunerado”, en el marco de la XXVI Conferencia Regional sobre Migración (CRM).
En este espacio, representantes de Belice, Canadá, Costa Rica, El Salvador, Estados Unidos, Guatemala, Honduras, México, Nicaragua, Panamá y República Dominicana, los 11 países que conforman la CRM, intercambiaron experiencias a fin de promover políticas públicas que permitan visibilizar, reconocer y fortalecer los derechos, garantías y protección de quienes laboran en hogares.
En este contexto, se dio a conocer que, de 52.6 millones de personas dedicadas a este oficio en el mundo, 83 por ciento son mujeres, con base en informes de la Organización Internacional del Trabajo (OIT).
En América Latina y el Caribe, el número de trabajadores del hogar remunerado oscila entre 11 y 18 millones; 93 por ciento son mujeres, informó la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal).
Durante los trabajos de esta mesa de diálogo, se advirtió que a pesar de que existe una intensa movilidad laboral entre estos países, no hay mecanismos que logren aprovechar las competencias de las y los trabajadores del hogar, de manera que sean reconocidas y certificadas para brindar mejores oportunidades laborales.
Alertaron que las migrantes trabajadoras del hogar remunerado enfrentan una débil regulación y protección laboral, lo que provoca un trato desigual, las expone a mayores riesgos y a un trabajo precario.
Plantearon que esta situación si bien debe atenderse a nivel nacional, puede ser sostenida y reforzada desde el nivel regional, mediante la activación de mecanismos de cooperación entre países que requieran y demanden esta mano de obra.
De igual forma, mediante acuerdos de regularización y reconocimiento de competencias en labores del hogar, en un marco de diálogo social con participación de organizaciones de empleadores y de trabajadores, como los principales actores del mercado de trabajo.
En el momento actual -destacaron- muchas personas dedicadas al trabajo del hogar y de cuidados, se han visto impactadas por los efectos de la pandemia de COVID-19, ante lo cual se hace necesario la promoción de políticas públicas que atiendan la vulnerabilidad en la que se encuentran, sobre todo en aquellas naciones donde no se contempla su afiliación a la seguridad social.
En este sentido, desde la Presidencia Pro-Tempore de la XXVI Conferencia Regional sobre Migración, que actualmente corresponde a México, se ha previsto impulsar acciones para promover una mejor atención y asistencia regional a todas las personas migrantes, en especial a aquellas que pertenecen a grupos excluidos, discriminados y vulnerados en el ejercicio de sus derechos, y a detonar estrategias regionales para la incorporación y reconocimiento de las habilidades y competencias laborales.
La Conferencia Regional sobre Migración fue creada en febrero de 1996 para la discusión abierta de temas migratorios regionales y el intercambio de información y experiencias entre los países que la integran. En diciembre pasado, México asumió la presidencia Pro-Tempore 2021 de este mecanismo regional.
