En menos de una semana otro hombre privado de su libertad (PPL), al interior del penal de San Miguel, fue hallado sin vida y con huellas de violencia.

El hoy occiso había sido trasladado de las celdas del Centro de Observación y Clasificación (COC), al dormitorio C, Celsa 3.

Su cabeza y pies presentaban golpes que estarían relacionados a acciones de tortura que recibió antes de que le arrebataron la vida.

El domingo pasado se reportó el deceso de un interno que presenta  contusiones en el cráneo, tórax y otras partes del cuerpo.

En ambos casos la Secretaría de Seguridad Pública no ha emitido información respecto a las dos muertes, pese a los señalamientos de familiares de internos que aseguran que grupos delictivos controlan el penal y a través de la violencia los obligan a pagar extorsiones.