Una iniciativa legislativa busca transformar el proceso de titulación universitaria en México, eliminando la tesis y el examen profesional como requisitos obligatorios.
La diputada Bertha Osorio Ferral, integrante del grupo parlamentario de Morena, presentó una propuesta que podría cambiar radicalmente la forma en que los estudiantes obtienen su título universitario. La iniciativa plantea que, al concluir sus estudios y acreditar todas las materias y créditos correspondientes, los alumnos reciban automáticamente su título profesional, sin necesidad de elaborar una tesis ni presentar examen profesional.
¿Qué implica esta propuesta?
De aprobarse, el nuevo esquema permitiría que los egresados de licenciatura obtengan su título únicamente con el cumplimiento del plan de estudios. Esto eliminaría dos de los requisitos más tradicionales y, para muchos, más complejos del proceso de titulación: la tesis y el examen profesional.
La propuesta responde a una creciente tendencia en instituciones educativas que han comenzado a ofrecer alternativas de titulación más ágiles, como diplomados, seminarios o titulación automática, especialmente en universidades tecnológicas y normales.
¿Por qué eliminar la tesis y el examen?
Entre los argumentos que respaldan esta iniciativa se encuentran:
- Acceso más rápido al mercado laboral: Eliminar estos requisitos podría reducir el tiempo de espera para que los egresados comiencen a ejercer profesionalmente.
- Reducción de costos: La elaboración de una tesis y la preparación para el examen profesional pueden representar gastos significativos para los estudiantes y sus familias.
- Inclusión educativa: Facilitar el proceso de titulación podría beneficiar a estudiantes de contextos vulnerables que enfrentan barreras económicas o académicas para completar estos requisitos.
Reacciones y debate
La propuesta ha generado opiniones divididas en el ámbito académico. Mientras algunos sectores consideran que la tesis es una herramienta valiosa para desarrollar habilidades de investigación, otros señalan que su obligatoriedad ha perdido relevancia y que existen métodos más eficaces para evaluar el conocimiento profesional.
Incluso figuras como el empresario Carlos Slim han expresado públicamente su apoyo a la eliminación de la tesis como requisito de titulación, argumentando que representa un obstáculo innecesario para los jóvenes que ya han cumplido con sus estudios.
¿Qué sigue?
La iniciativa deberá ser discutida en comisiones y, eventualmente, en el pleno legislativo. De avanzar, podría marcar un precedente importante en la reforma educativa del país, especialmente en el nivel superior.